mientras finjo que te amo,
me siento más sólo.
No sé a qué juego enamorando
a varias mujeres, vendiéndoles miseria
y poemas a cambio de sus piernas.
No sé qué pretendo con esa linda chica
de diecisiete años, mientras le apreto los senos
y sacio mi perversidad y me bebo su ternura.
Entre mis diferentes e infinitas soledades
invoco a una extraña que tal vez anda por ahí
pensando en el trabajo, comiendo o haciendo el amor.
Yo imploro al mundo que me deje verla un día
ande yo sobrio y de buena cara
para lanzarle un hola y ver qué pasa.
Imagino que vendrá con sus dedos finos y largos,
me elegirá como se escoge una fruta de un árbol
y si me va bien, me comerá.
Ojalá que tenga pies pequeños cortados como pan
y que tenga un torso esbelto y blanco
y rodillas adiamantadas y que huela a café.

Fotografía: Edward Olive.
4 comentarios:
muy a gusto con el nuevo diseño .... Se ve muy bien
Gracias. Ojalá puedas dejar tu nombre en próximos comentarios. Un abrazo.
Gracias por el apoyo para mi fotografía.
Un saludo
Edward Olive fotógrafo profesional de Madrid España
http://edwardolive.info/
Gracias a vos por permitirme su uso. Saludos.
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